domingo, 2 de agosto de 2009



Desafiar al tiempo, desafiar el péndulo, desafiar a ese ultimo grano de arena a que no cruce ese destierro. Desafiar el viento, retándolo a ver las consecuencias de hacer destilar nuestro olor en su primer vuelo. Desafiar al tren, dejándolo correr, total otro atrás va a haber. Desafiar el sol, eclipsándolo con tus manos en aquellos días que las nubes como cómplices, fallen en su trabajo. Desafiar a la luna, borrando a sus guardianes una por una, luchar contra sus constelaciones para desnudarla en la penumbra. Desafiar el agua, evitando que cada ola rompa contra la orilla, quitarles su fuerza, ahogarlas en su propia marea. Desafiar la exactitud, “el todo es más que la suma de las partes”. Desafiar el recuerdo a qué deje de serlo, y se materialice delante nuestro. Desafiar al llanto, sellando su salida con unos ojos de plástico. Desafiar al alma a vivir separada del cuerpo, desafiar al cuerpo a vivir sin alma. Desafiar el aliento, a que en pleno invierno no se evapore en nuestros versos. Desafiar el aire, a poderlo medir en un tubo descartable. Desafiar el aroma, a que perdure en nuestro sentido, y poder retenerlo. Desafiar la mirada, atraparla con palabras, y hacerla descender como una esclava. Desafiar el olvido, con el olvido desafiando mis ganas, desafiar mis ganas con la vana idea de desafiar el mañana.

1 comentario:

  1. Chanchaaaa jajaja media hora pa saber q era!!
    Muy bueno lo q pusiste! Loescribiste vos?
    Bsote te quieroooo mucho (L)

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