Hasta que un día de tanto usar el verde lo consumi, y desconcertada pedi mas lapices de color verde a mis padres, que se negaron rotundamene exigiendome que usara los otros colores, pero yo contesta entre sollozos: -no, porque nadie puede hacer el verde, yo quiero el verde.
Desde ese día no use ningun lapiz de color, me rehusaba a pintar, me rehusaba a decorar cualquier cosa dibujada con otro color que no sea el verde...
Pasaron los años, y descubri, que perdi años de pintar solamente porque no tenia el verde, ya que en una clase del colegio una maestra me dijo: "el azul y el amarillo forman el verde"
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